Hoy en la mañana como a eso de las 10, me puse a hacer
Zapping (acción de saltar de programación de manera continua), hasta que me
detuve en un canal de televisión nacional, y estaban mostrando el ultimo
capitulo de Chacalón “El ángel del pueblo”, una miniserie que se realizo en
memoria de la estrella máxima de la Chicha, música predilecta de los inmigrantes andinos
hacia Lima. A decir verdad termine de ver todo el capitulo, nunca supe lo mucho
que representó este hombre para la población inmigrante andina y lo mucho que
lo llegaron a querer, en verdad Lorenzo Palacios Quispe “Chacalón” se convirtió
en un verdadero ídolo en todo el sentido de la palabra, es decir como músico y
como persona, ya que se dice que ayudaba a los pobres y que era un hombre con
un corazón enorme, el día de su velorio un mar de gente con lagrimas en sus
rostros llevaba su ataúd hacia el cementerio de el Ángel donde fue enterrado, la verdad nunca había
visto imágenes de un entierro así, de seguro fue un gran hombre.
En la tarde me dirigí a Miraflores, y me encontré con un
“amigo” de hace mucho tiempo, el siempre fue un tipo muy “respetuoso” y sobre
todo cortés, muy pero muy cortés, poseía siempre buenos modales, en verdad
siempre lo conocí como un chico bastante educado. Pero hubo algo que me llamo
la atención, le comente lo sorprendido que quede con el capítulo final de esta
miniserie y el solo atino a hacer un gesto despectivo acerca de mi comentario,
yo por ser respetuoso ignore lo sucedido, y me puse a recordar que en el lugar
donde estudiábamos el siempre frecuentaba un solo grupo, el grupo de la gente
económicamente más acomodada y por allí uno que otro gato, para mí era extraño,
ya que siempre me socializaba con todos, acomodados o no, creo que siempre tuve
la suerte de sentirme cómodo con todos; estuvimos caminando mientras él
esperaba unos amigos con quienes quedó en reunirse en ese centro comercial.
Estuvimos fuera del centro comercial por unos minutos, en eso, una señora de
condición humilde y apariencia andina, se le acerco y lo toco del brazo quizá
para pedirle seguramente una moneda, él de nuevo reacciono de manera despectiva
pero esta vez más violenta, me pidió alejarnos y vocifero comentarios
desagradables hacia la pobre señora, hiriendo la susceptibilidad de esa pobre
mujer, en pocas palabras le falto el respeto.
A pocos minutos, gracias a Dios llegaron sus amigos, como
siempre cortés lleno de protocolo me presentó a ellos, al instante se le
ocurrió comentar acerca de lo sucedido, mientras él lo contaba, sus amigos
parecían mirarlo como diciendo “QUE IMBECIL ERES” , yo en seguida me despedí; y
me dije pero este “pata” siempre me pareció un hombre respetuoso y amable,
claro nunca fuimos amigos y creo que no lo conocí hasta hoy.
Más tarde como jugando busque en el diccionario y encontré
lo siguiente:
CORTES: Atento, educado o que se sabe comportarse de acuerdo
a las normas sociales establecidas.
RESPETUOSO: Aquel que tiene consideración o reconocimiento
por una persona o cosa.
Y me di cuenta que no es necesario ser cortés para ser
respetuoso, son cosas que parecen ser las mismas pero creo que no lo son,
después de un rato caminando me dije: “Pero si yo soy del mismo color de la
Tía” seguro me usó para esperar a sus amigos, jajajajajaja, que HDP pero en
fin, debo sentir más lástima que otra cosa, y recordé algo que leí del gran
Carl Marx, aquel pensador Prusiano (nacido en el antiguo gran reino europeo de
Prusia), ya que él era un gran luchador de las clases sociales, dijo una vez “
el obrero tiene más hambre de respeto que de pan”, y creo que el decirle no de
manera respetuosa a esa mujer hubiera sido más que suficiente, en fin queridos
lectores seguro Chacalón no era muy educado ni cortés como ese “patita”, pero
por lo que vi en ese último capítulo de su miniserie, fue más pero mucho más respetuoso……”Soy
muchacho provinciano , me levanto muy trempano…………”
Hasta la próxima….!
Jorge Horna
He disfrutado leyendo esta anécdota jajaja gracias.
ResponderEliminar