jueves, 27 de febrero de 2014

DAME QUE TE DOY

En el 2008 yo llegué a trabajar en Starboard Cruises , es una empresa concesionaria de barcos cruceros, ellos ofrecen el servicio de tiendas, esas llamadas DUTY FREE, es un trabajo bastante deseado por muchos tripulantes en los barcos cruceros, ya que la relación trabajo-pago es bastante considerada, no se gana mal y no se trabaja tanto como otras posiciones  abordo.
Después de haber trabajado en el departamento de pisos por 7 años (Trabajo de M…), renuncié y postulé a este trabajo de los duty free, fui aceptado por ellos y recuerdo que en mi primer contrato trabajé como si estuviera en mi antiguo trabajo de pisos, es decir, peor que Hebreo construyendo las pirámides;  eso me ayudo mucho a que me consideren, además que tenia cierto floro para las ventas. Así fui promovido rápidamente al puesto de supervisor me tocó como compañero-supervisor un Indio,  el estaba ya a punto de ser Gerente, tenía una novia espectacular, era muy pero muy hábil, manejaba la computadora a diestra y siniestra; encima se tiraba toda la plata que ganaba en lujos ya que su papa tenía mucho dinero y le iba a tocar parte de la herencia así que no se tenía que preocupar en ahorrar pan para mayo, porque su vida estaba ya económicamente resuelta. Pero…, como siempre los peros, se quejaba todos los días, de que la novia del Capitán está más rica que la mía, que yo me demore 4 contratos para ser supervisor y tu (hablaba de mi) solo 1, que nuestros empleados son una porquería, que el salario de Starboard era muy bajo que me quiero comprar un Hublot (reloj que cuesta 20 mil dólares) y solo me puedo comprar este maldito Breitling y este Tag de porquería (cada uno le costó 3 mil dólares); la verdad no lo aguantaba, pero él me enseñó varias cosas con respecto al trabajo y lo valoré mucho, quizá fue la razón porque no lo mande bien lejos.
Este individuo era el más odiado de las tiendas duty free de los cruceros Holland America, tenía mala fama; y es cierto nunca respetaba a los empleados; nunca te hacia un favor, claro el me enseñó mucho pero imagínense quién era el que hacia todo el trabajo, es decir no te hacia un favor si no le convenía; no era condescendiente con su novia una hermosa Croata que claro primeriza en barcos vio piel canela, cabello negro, ojos obscuros y se enamoró profundamente de un típico indio machista; su madre de mucho dinero lo llamaba hasta el barco y el nunca lo hacía, además no recuerdo que hablara de su familia; gastar 3000 dólares en un reloj que te da la hora y negarse a comprar un reloj de 200 para su madre (esto me lo conto la novia) que le dio la vida.
Y porque cuento esto, es que a veces me quejo de cosas que me pasan y en verdad digo doy tanto para esperar recibir tanto, y tal vez no, y miren al indio a quien me refería, en verdad merecía  vivir tranquilo alguien como él,  cuantas lagrimas hizo derramar a su novia y tal vez a su madre, a muchas de las empleadas, nunca le hacía favores a nadie; y es que tal vez Dios o la vida le da a cada uno lo que se merece, y si tu no das tranquilidad a alguien como esperas recibirla, mejor dicho si no das tranquilidad como esperas PERCIBIRLA, porque de repente ya la tienes pero eres tan egoísta o tan no sé cómo llamarlo, que no la notas o tal vez deseas más de lo que te mereces.  
Es que tu cosechas lo que siembras, si gritas te responderán gritando tal vez eres sordo, si trabajas duro te recompensaran tus jefes claro los buenos jefes, si das amor te amaran mucho, si comprendes te comprenderán, si das amistad sincera e incondicional la recibirás ojo solo de los buenos amigos, si llevas regalo te darán doble torta, si estudias triunfas, si sabes que estás haciendo el bien el PAPA de arriba no se olvidara de ti; dicen que hay que dar sin esperar recibir algo a cambio, tal vez suena muy bíblico o muy evangélico, tal vez es mejor que des y si algún día necesitas, estate tranquilo que vas a recibir; pero nunca, eso si nunca DEJES DE DAR Y ESPERES RECIBIR, o tal vez recibas pero la vida es tan cruel que no te darás cuenta como al pobre indiecito, querido lector no seas conchan, que en esta vida recibirás tanto como das, escribí tanto que yo sé que me darán muchos likes y comentarios si no la próxima será.
Que dios te escriba el doble de lo que tú me escribes…..!
Jorge Horna.













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